El hecho de redactar comentarios de textos filosóficos es el mayor problema con el que se suelen encontrar los estudiantes de Filosofía en bachillerato, sea cual sea la rama que estén cursando.
Esto se debe, en parte, a la dificultad de expresar por escrito los conceptos abstractos que aborda la filosofía, pero también por la falta de costumbre de pensar en ellos en la vida diaria y por la pobreza generalizada de la expresión escrita.
La mayoría de profesores de filosofía de Bachillerato se limitan a explicar la vida, los pensamientos y las teorías de los filósofos sin adentrarse en ellas y sin invitar al pensamiento crítico del alumno, que es esencial para que el comentario de texto tenga un punto de vista personal y maduro.
La solución para superar estos problemas tan comunes en la asignatura de filosofía es, primero, saber la estructura de un comentario crítico, para después poder presentar al filósofo en su contexto histórico, seguido de una exposición de sus pensamientos y, finalmente, una conclusión donde el alumno pueda aportar su visión y, si es posible, la alicación de esas filosofías a los problemas actuales para dotarlos de una dimensión real y útil.